O bo, o feo e o malo... ¿que personaxe interpretas na educación?

Publicado con autorización de http://www.educapeques.com/
Autora: Irene González Collado (Maestra de Ed.Infantil y Psicopedagoga)

A menudo, los agentes educativos que participamos en el desarrollo evolutivo de un niñ@, caemos en el error de adoptar diferentes “roles”.
¿Qué padres no se han visto envueltos alguna vez en situaciones de tal índole?… “Mamá: Termínate el bocadillo. Papá: Bueno, cómete una parte del bocadillo. Abuelo: Un bocadito, y ya está. Abuela: No te lo comas, a ver si te va a doler la barriga…ya cenarás después.” El encontrar diferentes respuestas en según a qué personaje te dirijas es un erros muy común, que los niñ@s saben aprovechar.
El entorno del niñ@ debe compartir las mismas premisas para colaborar de forma unánime en la Educación de los más pequeños, ya que de ellas, se construirá la base que dará apoyo a los hábitos, valores, y enseñanzas que se vayan adquiriendo a través de la vida.
Todas y cada una de las personas que están alrededor del niñ@ son importantes, y pueden jugar un papel relevante en su vida, siendo inoportuno y poco constructivo  desechar la presencia de alguna de ellas por edad, distancia, o falta de entendimiento entre adultos.
“Para educar a un niñ@ hace falta la tribu entera”, y esto no lo digo yo, lo rescata el profesor, filósofo y escritor, Jose Antonio Marina, de un antiguo proverbio africano. El ilustre citado, defiende (y yo con él),  que todos somos responsables de la educación de los niños que se crían en nuestro grupo social; todos, cada uno desde su puesto en la sociedad, debe retomar su papel y enseñar a vivir. Niños, niñas y jóvenes beben de todas las fuentes que tienen a su alrededor, por lo tanto Educa todo el mundo, sea de manera voluntaria o involuntaria.
En la actualidad es inevitable hacer referencia a miles de familias, donde padre y madre están trabajando, y son los abuelos o algún familiar cercano, los que atienden o pasan un mayor tiempo con los niñ@s, viéndose así, incrementada su influencia. Esta situación es sólo un ejemplo en el que se delega educativamente. Llegados a este punto, es conveniente tener una puesta en común de premisas educativas, parar llegar a crear un entorno estable y acogedor, no sólo para el niñ@ si no también para los adultos, de esta forma evitaremos tensiones y malos entendidos.
Y algun@ se preguntará… pero ¿qué premisas? ¿es que no todos aplicamos el sentido común? Pues no, veamos algunos ejemplos…a veces inconscientemente entre la misma pareja de padres se desautorizan, o entre padres y abuelos (u otros familiares) se confrontan perspectivas acerca de lo que se debe o no permitir, y por último, con la escuela, últimamente hay un gran abismo por el cual hay que trazar puentes urgentemente.
Intentaré resumir brevemente los factores principales para la puesta en común de las mencionadas premisas educativas:
  • Las rutinas. Horarios de comidas, siestas, hora de acostarse etc… No es muy normal, que si el niñ@ se queda en casa del “tío Juan”, duerma una siesta de 3 horas, cuando su tiempo de siesta es de 45 min, es necesario poner al día al “tío Juan”, él no es adivino, y si  lo permite quizá es porque no ha habido puesta en común.
  • Hábitos de aseo. Vestirse, desvestirse, lavarse los dientes, ayudar cuando se asea… A veces los niñ@s hacen como si no saben hacerlo, pero son capaces perfectamente. Claro, son muy listos, es más cómodo que te hagan las cosas, antes que esforzarse en hacerlas. Acordad lo que sabe o no sabe hacer, y en lo que colabora o no, así se le exigirá igual esfuerzo sea cual sea el contexto.
  • Hábitos alimenticios. Lo que se puede o no, comer entre horas, o la cantidad que me puedo o no dejar…!!Cuidado!! Los niñ@s no eligen el menú del día, es el adulto siempre el que le dice lo que debe comer. Me sorprendo cuando algún abuelit@ me dice que su nieto (el cual come todos los días en su casa) es el que les dice lo que quiere que hagan de comer, y de lo contrario, si no se le complace, no come. Maaaaaallll, ese chantaje no se debe consentir.
  • Responsabilidades en casa: recoger habitación, ayudar a poner la mesa, ayudar en tareas domésticas, realizar sus deberes… Volvemos a recordar lo mismo que las rutinas, debe haber un consenso familiar. Precisamente en los colegios, los niñ@s siempre tienen responsabilidades, sobretodo cuando son los “encargados del día”, y cuando informas a las familias de lo que hace su hij@ se sorprenden bastante de la responsabilidad que es capaz de asumir. Reflexiona: te está tomando el pelo.
  • Normas acerca de lo que le está permitido según su edad.
  • Fórmulas de cortesía. Aprender a decir y utilizar “Gracias” “Buenos días” “Buenas tardes”, “Hola”, “Adiós”, “Por favor”, “Lo siento”, “Perdón”. Este aspecto debe nacer en casa, y debe nacer por pura imitación y ejemplo a seguir. Por lo tanto seamos prudentes con el vocabulario, las expresiones, y las conversaciones. Somos los adultos el ejemplo a seguir, no el ejemplo a evitar, tomemos conciencia de esta cuestión.
En resumen, se acabaron los juegos de “tú haces de bueno y yo de malo”, eso lo vamos a dejar para la películas. Para la vida real, te invito a apostar por un modelo de consenso, donde prime la comunicación, y sobre todo, el sentido común.
Toda familia debe comportarse como una verdadera piña, y sacar entre todos a los más pequeños hacia delante, ellos necesitan entornos estables, que les aporten equilibrio.