Ensina ao teu fillo/a a ser máis autónomo

Republicado con autorización de: http://www.educapeques.com/

El niño autónomo: La autonomía es un valor que todo padre y madre debe inculcar en sus hijos ya que esto construye adultos íntegros y autosuficientes.
A la hora de hablar de autonomía es importante pensar también que esta está ligada íntimamente con la responsabilidad. Si bien es cierto que a menudo actuamos sobreprotegiendo a nuestros hijos, también es importante comenzar a regular esta actitud ya que no es beneficiosa para ellos. De hecho una de las creencias más comunes es pensar que nuestros hijos no pueden ser responsables. Sin embargo es necesario que ellos (en forma gradual y dependiendo de las edades que tengan) comiencen a tomar mínimas responsabilidades.

Beneficios de un niño autónomo

Como mencionamos más arriba un niño adulto se convertirá en un adulto independiente y responsable.
Por otra parte generamos en él confianza. Esto elevará su autoestima y potenciará el desarrollo de un tipo de personalidad madura.
Pero ¿De qué modo se logra la autonomía? Con estrategias de análisis, planificación y reflexión. Veamos en detalle estos puntos para enseñar a ser un niño autónomo:

Enséñale a pensar por sí mismo

Un niño que pueda tener un discernimiento sobre cada situación, será un adulto preparado para poder pensar por sus propios medios, evaluar cada situación y poder comprender cada situación con una evaluación propia.
Pregúntale “qué piensa o cree él de cada situación”. Ayúdalo a que se supere a sí mismo.
Una estrategia muy utilizada es la de generar nuevos aprendizajes pero siempre ten en cuenta que los aprendizajes deben ser divertidos para él.

No le des todo lo que te pida

Si accedes a todo lo que él te pida, entonces el niño crecerá sabiendo que “siempre podrá recurrir a ti”. Claro que como padres nuestro deseo es siempre estar al lado de ellos pero también es importante darles las herramientas para que puedan desenvolverse de forma autónoma.

Niño autónomo: Preséntale diferentes responsabilidades

En este punto deberás ajustar lo que sugerimos a continuación dependiendo de su edad.
·                        No lo vistas tú, deja que él lo haga aunque se equivoque.
·                        No lo bañes. En tal caso puedes estar cerca pero deja que él lo haga.
·                        Permite que el niño tenga alguna responsabilidad dentro del hogar: tender su propia cama, barrer su cuarto, poner o retirar la mesa, etc.
·                      Fomenta la responsabilidad de que “él es responsable por la realización de sus propios deberes (tarea escolar)”. Claro que puedes guiarlo pero no realices esta tarea salvo que ésta sea la consigna escolar (hay actividades que se pide se realicen como grupo familiar).

Enséñale que puede aprender de sus errores

Muéstrales que un error sólo es un paso para llegar a lograr o cumplir con el objetivo. Esto aplica tanto para el área escolar como para cualquier actividad que se proponga realizar. Lo ideal es enseñarle que, tras un error, puede corregir el rumbo (quizás cambiar el enfoque) y comenzar de nuevo.

Muéstrales que toda decisión tiene sus consecuencias

Es importante que ellos entiendan que cada acción (buena o mala) desembocará en una consecuencia determinada sobre ellos mismos y sobre el entorno.

Esto permite que los niños entiendan que cada comportamiento está ligado con el comportamiento de otra persona (o con sus consecuencias) y en poco tiempo podrá comenzar a ser un niño autónomo.